Amar me duele: Vaginismo

Las disfunciones sexuales son problemas en la experiencia erótica de mujeres y hombres. En las mujeres pueden presentarse dificultades para tener un encuentro sexual satisfactorio en cualquiera de los momentos de “la respuesta sexual” y también existen las experiencias dolorosas en el encuentro erótico, que inclusive impiden que pueda concluir.

Hoy platicaremos sobre Vaginismo, trastorno doloroso que viven algunas mujeres en el intento del encuentro sexual….

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Vaginismo, forma parte de las disfunciones sexuales, se caracteriza por la contracción involuntaria de los músculos que están en la pelvis y a su vez esta contracción impide la penetración durante un encuentro sexual. Es tanta la fuerza de los músculos de la pelvis que la vagina permanece “cerrada” aunque la mujer no lo desee y durante el encuentro sexual el intento de penetrar provoca dolor desde leve hasta intolerante.

Los expertos en el área definen el vaginismo como:

Dificultad persistente o recurrente para permitir la penetración de: Pene, Dedo, Objetos (juguetes) a pesar de que la mujer tenga el deseo de que ocurra. Es frecuente que las parejas de las mujeres con vaginismo a su vez tengan dificultades con la erección o eyaculación precoz.

Generalmente se presenta desde el inicio de la vida sexual y más francamente se manifiesta en mujeres a partir de los 20 años de edad, es decir ya se identifica con mayor claridad que algo ocurre que impide concluir el encuentro erótico.

Esta experiencia provoca otros problemas o disfunciones como pérdida del interés en tener relaciones, dificultad para sentir el orgasmo, conflicto de pareja, ansiedad, tristeza, etc.

Se ha intentado entender porque aparece esta disfunción en las mujeres, generalmente se asocian con experiencias sexuales tempranas negativas que pueden ser desde la educación hasta violencia o maltrato físicos y/o psicológico.

Lo que si queda claro es el impacto que tienen en la vida de la mujer que lo sufre y en casos extremos, la experiencia sexual se convierte en una “fobia”, con conductas de evitación por la experiencia dolorosa asociada.

Existe tratamiento, como lo hay para otras disfunciones, lo primero es identificar el problema, buscar la orientación de un experto en terapia o medicina sexual para solucionarlo.

Algunas estrategias son con técnicas de terapia sexual, psicoterapia, en algunos casos los medicamentos ayudan…

De esto y más comentaremos en nuestro programa de hoy, te va a interesar: “Escúchanos”.

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